OPINIÓN

Tocar un nervio

Denise Dresser EN EL NORTE

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Enrique Peña Nieto está ansioso. Luis Videgaray está preocupado. José Antonio Meade está inquieto. José Antonio González Anaya no puede dormir. Porque lo que ocurre en Chihuahua toca un nervio principal del sistema político. Pone presión sobre un punto medular, neurálgico.