Silvia Olvera.-
Los cimientos de la Cervecería Cuauhtémoc, que fundó junto con otros socios su abuelo Isaac Garza Garza, no hubieran sido lo suficientemente sólidos ni hubieran permanecido con el tiempo sin la contribución de su padre Eugenio Garza Sada, y la parte que le tocó aportar a Alejandro Garza Lagüera.
Fue en 1948, a sus 22 años de edad, cuando el nieto del fundador entró a trabajar como asistente de la gerencia de ventas, y conforme al paso de los años le tocó asumir otros roles, desde gerente de exportaciones hasta director general en 1960.
En su libro "Mis años en Cervecería Cuauhtémoc", presentado ayer en dicha empresa, hoy propiedad de la holandesa Heineken y en donde Femsa tiene el 20 por ciento de participación, Garza Lagüera recuerda cómo otras cerveceras en el mundo le abrieron la puerta para compartirle que parte de su estrategia no venía sólo de la venta del producto, sino también en otros negocio.
"De las buenas relaciones desarrolladas con las compañías cerveceras internacionales surgieron reuniones periódicas para intercambiar y compartir experiencias", detalla en su libro.
Entre los hallazgos importantes fue el darse cuenta de que los ingresos de esas compañías no provenían el 100 por ciento de la venta de cerveza, la cual representaba el 40 por ciento, el resto venía de ingresos de sus tiendas, hielo y otras bebidas.
Uno de esos hallazgos lo llevó a buscar operar tiendas de conveniencia, primero con Súper 7, proyecto que no duró mucho, pero de ahí surgió Oxxo, que hoy es en su ramo la más grande de todo el Continente americano.
A la presentación del libro acudieron algunos ex empleados de Cervecería, entre ellos Pedro Luis Durán, quien laboró de 1973 a 1994 con varios cargos, y quien destacó que parte de las aportaciones importantes de Garza Lagüera fue la implementación del sistema de abastecimiento programado, que les permitió combatir ineficiencias operativas.
Recordó que en 1976, los distribuidores hacían los pedidos a través de un telegrama semanal y en base a eso programaban la producción, que propiciaba múltiples cambios, altos costos, tiempos extras de operación, baja eficiencia de envasado, turnos extras de operación, entre otros.
Al evento también acudieron personalidades como Eva Gonda de Garza Lagüera, viuda de Eugenio Garza Lagüera, hermano de Alejandro; Salvador de Alba, presidente del Tec; Alfonso González Migoya, director del Museo Marco; el ex político y líder empresarial José Luis Coindreau, y el ex funcionario Carlos Zambrano Plant, entre otros.