Nos la estaban haciendo muy cachetona, pero por fin abrieron Sibau en Arboleda. Al menos valió la pena tanta expectativa. El restaurante quedó padrísimo, moderno y elegantito, con un diseño fresco y disfrutable, donde predominan los tonos marfil, aqua y carmín (blanco, azul y rojo, para que me entiendan los hombres).