Cuidado con los humos del poder
Llegó muy pronto el momento de recordarle a nuestro Gobernador independiente, Jaime Rodríguez, que no le gane la vanidad ni se le suban los humos a la hora en que se le pide que rinda cuentas.
Los nuevoleoneses le dieron su voto, pero no fue porque vieran en él al súper hombre. El pueblo se encontraba desesperado, en un callejón donde no se veía la salida.
Por un lado, teníamos la huella sin sanar del abuso de poder de Rodrigo Medina desviando recursos, apoderándose su familia de terrenos ejidales, gastando millonadas en imagen, endeudando al Estado sobremanera, a la vez que su padre, Humberto Medina Ainslie, se erigía como presuntamente el encargado de los moches exigidos a constructoras y proveedores del Estado.
Todo eso fue orillando a los nuevoleoneses a repudiar todo lo que viniera del Gobierno estatal, sobre todo de Medina.
Probablemente de esos abusos salió buena parte de las propiedades de Medina Ainslie, como los grandes fraccionamientos que posee en San Antonio. ¿O podrá argumentar que son herencia de él o de su mujer?
¿Qué podrían responder Rodrigo Medina y sus hermanos con las residencias que han comprado a nombre de sus esposas? ¿Qué responderán ellas? ¿Que se las compró su papi o abuelo?
Si a eso le sumamos los muchos millones de pesos que presuntamente envió a la campaña presidencial de Peña Nieto... probablemente esos billetes son los que hoy lo tienen gozando de impunidad.
Además, teníamos el hartazgo de la partidocracia, con ningún partido político libre de vicios.
Ante ese panorama político tan desolador, volteamos a ver lo que nos ofrecía el ranchero... y fue entonces que fincamos nuestras esperanzas en el binomio de Jaime Rodríguez y Fernando Elizondo.
Y cómo no iba a ser así, si era casi una catarsis escuchar esas promesas de meter a los corruptos a la cárcel -o "cortarles la mano"- y revisar cuentas de todas las dependencias.
"El Bronco" nos anestesió con el tema de que él castigaría a los responsables del súper endeudamiento del Estado.
Decía: "Se les apareció el diablo, y algunos se irán al infierno, y saben, ahí queríamos situar a los corruptos: en el meritito averno". Y esas promesas de justicia lograron su victoria.
Ahora somos muchos los nuevoleoneses que nos sentimos tristes y desconcertados al ver que ya saltó la liebre del "cobijagate" con la compra de 200 mil cobijas a un precio súper inflado, reportada por EL NORTE.
Los argumentos irrisorios de defensa de Rogelio Benavides Pintos, Subsecretario de Administración de la Tesorería -responsable de la compra- y las constantes evasiones de "El Bronco" al tema (hasta terminar por decir que "Tu periódico no es la Procuraduría", olvidando que un medio honesto es ni más ni menos el espejo de la realidad), nos deja en blanco en cuanto a explicaciones que puedan demostrar que la acción fue limpia.
Sobre la otra crisis que le estalló casi simultáneamente a "El Bronco", la masacre del Penal del Topo Chico, donde murieron 49 personas: todos sabemos que desde años atrás la delincuencia organizada era quien controlaba el centro penitenciario.
Pero si se hubiese hecho algo en los últimos meses, probablemente se hubieran evitado las muertes. ¿Olvido?, ¿displicencia?, ¿distracción por andar pensando en la Silla Grande?
Otro punto que nos está llevando al desencanto es que cada vez "El Bronco" pide más tiempo para revelar las pruebas con las que pueden incriminar a Medina. La "falta de tiempo" empieza a oler a falta de voluntad.
Rodríguez debe dejar de una vez por todas la ambición de su sueño de llegar a ser Presidente.
Y en vez de andar los fines de semana dando asesorías en otros Estados de cómo manejar las candidaturas independientes, debe dedicarse a resolver los desmanes que se le han formado en Nuevo León. Así de claro.
irma.mtzm@gmail.com
Tiene 24 años de escribir en el periódico EL NORTE y es coordinadora de los Consejos Editoriales de este medio.