LOCAL

Pandemia los lleva a tocar para todos

Mirna Ramos

Monterrey, México (27 agosto 2020) .-23:38 hrs

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Martín Sánchez.

Martín Sánchez. Crédito: Mirna Ramos

Julio Guerrero.

Julio Guerrero. Crédito: Mirna Ramos

Daniel Reyes.

Daniel Reyes. Crédito: Mirna Ramos

Raymundo Cuevas.

Raymundo Cuevas. Crédito: Mirna Ramos

La emergencia por el Covid-19 convirtió las calles del Primer Cuadro de Monterrey en un inesperado escenario donde, ante el impacto de la pandemia en su empleos habituales, varios músicos tratan de compensar la baja en sus ingresos mientras dan un aire de concierto al paisaje urbano.
Publicidad
Equipados con sus violas, guitarras, cellos y bajos, cada uno, por separado, inunda su esquina con piezas de rock, pop o temas de películas.

De las aulas a las calles

Hasta hace algunos meses, Raymundo Cuevas, músico de profesión, se dedicaba de tiempo completo a dar clases de violoncello tanto en escuelas como de manera particular.

Pero la emergencia sanitaria le impidió continuar con sus labores y tuvo que buscar otra manera de obtener ingresos, y desde hace dos meses hace lo que sabe en la esquina de Morelos y Juárez.

"Por el Covid se dificultaron las clases", dijo, "los alumnos están dejando de ir. Se me está dificultando más sacar dinero, (y) pues estoy viniendo a tocar por lo mismo, para seguir sustentándome de mientras.

"La gente sí responde".

Primero era promoción, ahora es trabajo

Antes del coronavirus, Daniel Reyes, de 26 años, ya solía tocar en las calles los fines de semana.

Su principal objetivo entonces era promover a Voltto, el ensamble de cuerdas del que forma parte con un violinista y un cellista.

Ahora ha tenido que hacerlo también entre semana, y no sólo con fines de promoción.

El joven explica que normalmente trabaja como asesor inmobiliario en un negocio de su familia, pero que la actividad ha disminuido debido a la pandemia y su habilidad con la música le permite complementar sus ingresos.

"Parte es más que nada por la promoción, pero no me quejo del dinero. Ahorita anda todo bajo la verdad. Como quiera sirve", explicó el joven apodaquense.

Menos dinero, más horas

A sus 26 años, Martín Sánchez está a punto de terminar su carrera de Diseño Industrial y para sostenerse se ha dedicado a tocar el violoncello en eventos y en la calle.

Antes de las restricciones salía a la calle a tocar en grupo con otros dos amigos, pero desde que inició la pandemia ese modelo en que repartían las ganancias no es sustentable, y ahora tiene que trabajar más tiempo para sacar lo mismo que antes.

"Ahorita no sale si andamos en grupo. No es el mismo ingreso, así que andamos en modo solista", explicó el integrante del ensamble Tetracorda.

Martín extraña un poco la respuesta que antes tenía del público, cuando nadie hablaba de la sana distancia.

"Ahorita no se queda mucha gente, por lo mismo que no pueden estar en aglomeraciones, pero antes de la contingencia llegaba a contar entre 80, 100 gentes".

Rock desde la Indepe

Cuando tenía 15 años, Julio Guerrero, ahora de 20, aprendió a tocar la guitarra en el Macrocentro Comunitario de la Colonia Independencia, que es el sector en donde vive.

Y desde hace algún tiempo, una guitarra eléctrica que le compró su padre se convirtió en su modo de vida.

Él toca rock y más rock en la Avenida Juárez desde antes de que se hablara del coronavirus y de que se impusieran restricciones a las actividades económicas.

En el tiempo que ha durado la pandemia, contó, ha tenido días irregulares, ya que a veces sus ingresos llegan con normalidad y en otros casos batalla para reunir lo que necesita.