MULTIPLAZA

Danza Baras para espíritus

Francisco Morales V.

Cd. de México (17 febrero 2015) .-18:21 hrs

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Desde Madrid, Sara Baras deja salir una especie de mantra por el auricular del teléfono: "Hay profundo, pero no hay triste". Lo dice con la mente poblada por grandes exponentes del flamenco que ya fallecieron, como Paco de Lucía y Carmen Amaya.

Ésta, la profundidad sin tristeza, es la esencia de Voces, suite flamenca, el espectáculo que traerá a final de mes (27 y 28) al Palacio de Bellas Artes. Se le escucha conmovida y no es para menos: la presentación es un homenaje explícito a sus figuras tutelares.

En esta visita a la Ciudad, la bailaora nacida en Cádiz trae consigo el recuerdo de grandes como Antonio Gades, Camarón de la Isla, Enrique Morente, Moraíto, Paco de Lucía y Carmen Amaya. Son estas voces -algunas parte de su pasado- las que tendrá en mente al zapatear sobre el escenario.

"(Para este espectáculo), cuando bailas, lo haces representando los palos (variedades tradicionales) del flamenco, acordándote, llenándolos de detalles que van dedicados a ellos (los homenajeados), pero sin meterte en ningún personaje, sino realmente con un flamenco tradicional", relata.

"Como se suele decir aquí: con un flamenco pa'lante", define. Esta vuelta a las raíces -para bailar en la propia piel- representa un alejamiento de piezas como Medusa, la guardiana, coreografía en la que interpreta a través del baile a la gorgona mitológica.

Aunque tiene palabras cálidas para todos, Baras pone especial énfasis en recordar a Paco de Lucía, cuyo fallecimiento hace casi un año todavía enluta al flamenco. Para la bailaora, quien ha dedicado su vida al género desde niña, no fue, por supuesto, un acontecimiento menor.

"Lo de Paco fue algo que me descolocó totalmente. Cuando se fue, era como no poder ni siquiera escuchar la guitarra, no podía bailar. Era una cosa bestial", cuenta. Además de su inspiración, De Lucía fue amigo personal.

De otros, como el guitarrista Moraíto, recuerda giras artísticas juntos. Para Camarón de la Isla guarda recuerdos de San Fernando, tierra del cantaor y donde Baras aprendió a bailar, en la academia de su madre, Concha.

En el homenaje participan también el bailaor José Serrano -mancuerna habitual-, dos guitarristas, dos percusionistas y tres cantaores. La música es de Queco Baldomero.

Para el cuerpo de baile que la acompaña tiene una intención precisa: "He querido darle más personalidad... en un cuerpo de baile muy igualado, pero resaltándolos como solistas".

Esto traerá de vuelta, ante los ojos del público, a los 6 maestros homenajeados en 12 bailes distintos.

"Soy una enamoradísima del flamenco, por supuesto, y ellos son parte de nuestra vida. Pensamos que era el momento de poder bailarles, sin pretender más que agradecerles y que recordarlos con una sonrisa", cierra.