OPINIÓN

Historia de un pancito dulce

Ximena Peredo EN EL NORTE

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Enteradas de la suspensión de clases, el miércoles muy temprano fuimos mi hija y yo al centro comercial más cercano. Necesitaba sacar dinero del banco porque mi rentero fue la única persona que, pese a todas las cancelaciones de mi agenda, confirmó su visita.