OPINIÓN

MÉXICO MÁGICO / Catón EN EL NORTE

0 MIN 30 SEG

10 abril 2025

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Cuando mis hermanos y yo éramos pequeños, nuestro padre, que de Dios goce -y que Dios goce de él-, nos divertía con un juego de sobremesa que nos llenaba de asombro y regocijo. Tomaba una servilleta de papel, la doblaba de modo que pudiera sostenerse sobre un plato y luego le prendía fuego con su encendedor. Se consumía la servilleta, pero quedaba en pie una estructura frágil que al terminar de arder se levantaba por el aire y descendía luego con lentitud hecha cenizas. "Brujas", si no recuerdo mal, llamaba mi papá a aquellos ígneos papeles volanderos.