OPINIÓN

MIRADOR / Armando Fuentes Aguirre EN EL NORTE

Icono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redesIcono para compartir en redes
Jean Cusset, ateo con excepción de la vez que escuchó a Horowitz tocar el Impromptu 3 de Schubert, dio un sorbo a su martini -con dos aceitunas, como siempre- y continuó: