Acto I: su "majesté" André-Pierre Gignac dilató por fracciones de segundos el remate a gol, invitando a postrarse a sus pies al portero Yarbrough.<BR><BR>Acto II: en el corredor del área, Rafael Sobis amagó a Germán Cano, provocando una fulminante conmoción en la humanidad del argentino y, una...