BIENES RAÍCES
Reverdecen las azoteas
Juan Antonio Moreno
Monterrey, México (31 mayo 2015) .-00:00 hrs
Tú puedes poner tu granito de arena para atenuar el efecto de la isla urbana de calor que afecta a las grandes ciudades.
El fenómeno consiste en el calentamiento de la metrópoli producido por la concentración de grandes superficies de asfalto y concreto.
Ésta es la causa principal de la diferencia de temperatura que usualmente existe entre las áreas suburbanas y las urbes.
Para contribuir a revertir este efecto y atenuar el bochorno, instalar un techo "verde" es una buena alternativa, comenta Claudia González.
"Debido a que estas superficies absorben el calor, ayudan a mitigar este efecto", añade la especialista del Centro de Formación en Edificación Sustentable de Monterrey, CEM.
Para lograr un mayor impacto, esta opción es más efectiva que, por ejemplo, un muro "verde".
La razón es que, por lo general, la mayor parte del calor que absorbe y libera una construcción su suscita en la losa.
Los "green roof", que son una especie de jardín contenido en una estructura elevada, genera otras ventajas para la metrópoli.
"Ayudas a que no se presenten inundaciones con cualquier lluvia, por mínima que sea, como ha sucedido en la Ciudad.
"Con los techos verdes ayudas a que se tenga un mejor control de las aguas pluviales", apunta González.
Según el sitio AzoteasVerdes.com.mx, éstas también permiten contrarrestar la contaminación.
Se debe a la capacidad que tienen de retener partículas suspendidas, que son la causa principal de las enfermedades de las vías respiratorias.
Según la literatura sobre el fenómeno de la isla de calor, los techos blancos son una alternativa para combatir sus efectos.
Se trata de azoteas recubiertas con pigmentos o impermeabilizantes de colores blancos o muy claros.
No obstante, González considera que no representan una buena opción para atenuar el efecto.
"Los techos blancos ayudan a la vivienda, porque de alguna manera se está reflejando el calor y no permite que entre.
"Sin embargo, ese calor irradia y termina rebotando en alguna otra superficie, lo cual no le beneficia en nada a la ciudad", expone.
Desde la perspectiva del usuario, los techos verdes son de utilidad incluso en días fríos.
Se debe a que permiten que no se escape tanto el calor que se genera dentro de tu vivienda.
"Con el concreto el intercambio térmico es muy rápido.
"Pero si tienes arriba una piel, que es el techo verde, te ayuda a que ese calor se escape menos rápido", enfatiza la experta.
El fenómeno consiste en el calentamiento de la metrópoli producido por la concentración de grandes superficies de asfalto y concreto.
Ésta es la causa principal de la diferencia de temperatura que usualmente existe entre las áreas suburbanas y las urbes.
Para contribuir a revertir este efecto y atenuar el bochorno, instalar un techo "verde" es una buena alternativa, comenta Claudia González.
"Debido a que estas superficies absorben el calor, ayudan a mitigar este efecto", añade la especialista del Centro de Formación en Edificación Sustentable de Monterrey, CEM.
Para lograr un mayor impacto, esta opción es más efectiva que, por ejemplo, un muro "verde".
La razón es que, por lo general, la mayor parte del calor que absorbe y libera una construcción su suscita en la losa.
Los "green roof", que son una especie de jardín contenido en una estructura elevada, genera otras ventajas para la metrópoli.
"Ayudas a que no se presenten inundaciones con cualquier lluvia, por mínima que sea, como ha sucedido en la Ciudad.
"Con los techos verdes ayudas a que se tenga un mejor control de las aguas pluviales", apunta González.
Según el sitio AzoteasVerdes.com.mx, éstas también permiten contrarrestar la contaminación.
Se debe a la capacidad que tienen de retener partículas suspendidas, que son la causa principal de las enfermedades de las vías respiratorias.
Según la literatura sobre el fenómeno de la isla de calor, los techos blancos son una alternativa para combatir sus efectos.
Se trata de azoteas recubiertas con pigmentos o impermeabilizantes de colores blancos o muy claros.
No obstante, González considera que no representan una buena opción para atenuar el efecto.
"Los techos blancos ayudan a la vivienda, porque de alguna manera se está reflejando el calor y no permite que entre.
"Sin embargo, ese calor irradia y termina rebotando en alguna otra superficie, lo cual no le beneficia en nada a la ciudad", expone.
Desde la perspectiva del usuario, los techos verdes son de utilidad incluso en días fríos.
Se debe a que permiten que no se escape tanto el calor que se genera dentro de tu vivienda.
"Con el concreto el intercambio térmico es muy rápido.
"Pero si tienes arriba una piel, que es el techo verde, te ayuda a que ese calor se escape menos rápido", enfatiza la experta.
