Tigres se empieza a convertir en un equipo de ideas arrugadas, de almas sin pasión, de ojos que no brillan, de metas comunes, incluso los veo faltos de obsesiones.<BR><BR>De aquel equipo que en el 2015 sorprendió a todos cuando a la cancha mandó un plantel de envidia y morbo, hoy, medianamente...