El Tesla Model S P100D presume una de las aceleraciones más veloces del planeta, pues solo le toma 2.6 segundos pasar de 0 a 100 kilómetros por hora. Crédito: Iván Moreno
Los interiores son minimalistas y presumen la ya característica pantalla tipo tableta. Crédito: Iván Moreno
El diseño exterior es muy atractivo: su carrocería tiene las proporciones clásicas de los deportivos, con cofre largo, cajuela corta, arcos de ruedas grandes y salpicaderas esbeltas. Crédito: Iván Moreno
El modo "ludicrous" del Model S P100D puede activarse desde la pantalla y libera todo el poder del auto. Crédito: Iván Moreno
La versión P100D cuenta además con pinzas de frenos rojas (que son opcionales en las demás versiones) y un pequeño spoiler trasero hecho de fibra de carbón. Crédito: Iván Moreno