El evento de moda más fastuoso del 2018 en Asia que nunca fue por culpa de una pizza, unos palillos chinos y unas furiosas redes sociales. Crédito: Staff
El staff de 2500 miembros se esmeró en un proyecto que terminaría siendo boicoteado desde las redes sociales. Crédito: Fernando Toledo
El escenario dorado que 360 estrellas de la pasarela nunca pisaron en Shanghái. Crédito: Fernando Toledo
La mampara publicitaria del evento quedó como un triste recuerdo. Crédito: Fernando Toledo
Los modistos buscaban la ternura de un oso panda y encontraron la furia de un dragón. Crédito: Dolce & Gabbana
Parte de los 500 outfits inspirados en la cultura china que se quedaron en el guardarropa. Crédito: Fernando Toledo